Este mes de septiembre se cumple un año del estreno de la película “Age of Stupid” una especie de documental que retrata cómo la humanidad teniendo consciencia del daño que le estábamos haciendo al planeta al ser responsables del “cambio climático” y a pesar de las alarmas no hicimos nada para solucionarlo.
La película de Franny Armstrong y producida por John Baltsek (nominado a los Oscar por “Un día de septiembre”), recoge imágenes impresionantes, a través de varios reportajes y testimonios, sobre los efectos del cambio climático. Se desarrolla en el 2055 cuando un hombre solitario que vive en una plataforma futurista que resguarda la mayoría de los tesoros del planeta, elabora un registro audiovisual y digital con los archivos del pasado. Al ver reportajes del daño causado unos cuarenta años atrás se pregunta: “¿por qué no hicimos algo para evitarlo?”
El estreno de hizo el año pasado como preámbulo a la celebración de la cumbre climática de Copenhague. “Esta película nos muestra la necesidad de tener líderes “inteligentes” que pacten un acuerdo mundial lo suficientemente ambicioso en la próxima cumbre de Copenhague en diciembre como para salvar el clima”, declaró Juan López de Uralde, director de Greenpeace España.
Un dato curioso es que la realización de la película fue posible gracias a la venta de acciones a 223 individuos y grupos preocupados por el cambio climático. Estos grupos están formados por una gran diversidad de gente que posee un porcentaje de la película.
El estreno mundial se realizó el 21 de septiembre en Nueva York, y formó parte de la agenda de actos de la semana del clima de la ONU. La proyección se realizó en otras de 100 salas de cine en más de 40 países de Europa, Asia, Medio-Oriente y África. En Madrid se desplegó una gran alfombra verde en los cines Ideal, y las numerosas personalidades que acudieron al estreno llegaron en bicicleta.
CNP 9983
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